En el mundo de las finanzas y los recursos humanos, estar actualizado es clave para evitar problemas legales. En este sentido, comprender la diferencia entre liquidación y finiquito es fundamental, pues ambos conceptos juegan un papel crucial en las relaciones laborales y a menudo, son malinterpretados o confundidos.
Este artículo se propone aclarar estas diferencias de manera sencilla, proporcionando una guía útil para calcular cada uno de estos elementos esenciales. Si eres un profesional que quiere estar al día y aprender, debes conocer esta información valiosa y aplicable.
Profundicemos en estos conceptos y descubramos cómo su correcta comprensión puede impactar positivamente en el entorno laboral y en la toma de decisiones empresariales.
¿Qué son liquidación y finiquito?
La liquidación y finiquito son dos conceptos que se relacionan con las rescisiones laborales, pero no son lo mismo. Hay diferencias que se tienen que tomar en cuenta para no cometer errores que tengan implicaciones legales para tu organización y no corras el riesgo de una demanda laboral.
Tener clara la definición de estos dos términos es clave para entender por qué no son equivalentes y para saber cuándo aplica cada uno, así que veamos ambos a fondo.
¿Qué es la liquidación?
La liquidación, a menudo confundida con el finiquito, se trata de la compensación que se otorga al empleado en caso de un despido injustificado o terminaciones de contrato bajo ciertas condiciones específicas.
A diferencia del finiquito, la liquidación va más allá de los salarios pendientes y las vacaciones no disfrutadas. Incluye, de manera crucial, indemnizaciones por despido. Las características clave de la liquidación son:
- Indemnizaciones por despido: se refiere a una compensación monetaria adicional destinada a mitigar el impacto del despido injustificado, la cual corresponde a 3 meses de salario.
- Incluye componentes del finiquito: además de las indemnizaciones, la liquidación también abarca los elementos típicos del finiquito, como los salarios pendientes, el aguinaldo proporcional y las vacaciones no tomadas.
- Posibles compensaciones adicionales: se incluye la prima de antigüedad, 20 días de salario por cada año laborado y prestaciones que haya generado el colaborador y no se hayan pagado al momento del despido.
¿Qué es el finiquito?
El finiquito es un conjunto de pagos que se otorgan al empleado al concluir su relación laboral con una empresa.
Es importante destacar que este no es una penalización ni un beneficio adicional, sino más bien una compensación por los servicios prestados hasta el último día de trabajo.
Los elementos que comúnmente forman parte del finiquito incluyen:
- Salarios pendientes: cualquier remuneración no pagada hasta la fecha de terminación, incluyendo horas extras o bonos.
- Vacaciones no disfrutadas: compensación por los días de vacaciones acumulados y no utilizados por el empleado.
- Bonificaciones proporcionales: esto puede incluir el pago proporcional de aguinaldo o participación de utilidades, según corresponda.
Liquidación y finiquito, ¿cuándo se otorga cada uno?
Ahora que sabes qué son liquidación y finiquito, es importante aclarar cuándo corresponde cada uno.
De esta manera, ambas partes, empleador y trabajador, saben exactamente lo que deben pagar y recibir en cada circunstancia y por qué.
¿Cuándo se paga liquidación?
La liquidación se aplica en situaciones específicas, principalmente en casos de despidos sin causa justa. Algunos de los escenarios típicos incluyen:
- Despidos sin causa justificada: cuando un colaborador es despedido sin un motivo válido según la ley laboral.
- Violaciones de los términos contractuales: si el empleador termina el contrato incumpliendo las condiciones acordadas.
- Protección del empleado: la liquidación actúa como un mecanismo de protección para los empleados contra despidos por rescisión de contrato por reestructuración de un área, cierre de la empresa o desaparición del puesto.
¿Cuándo se paga finiquito?
- El finiquito se aplica en distintas situaciones, cada una con sus particularidades:
- Finalización de contrato temporal: cuando un contrato de trabajo de duración determinada llega a su fin.
- Renuncia voluntaria: en caso de que el empleado decida dejar su puesto de manera voluntaria.
- Despido justificado: cuando el colaborador ha hecho algo que no debería según lo pactado en el contrato.
- Es fundamental entender que el finiquito sirve como un documento legal que confirma que todas las cuentas entre el empleado y el empleador han sido saldadas, evitando posibles reclamaciones futuras.
¿Cómo calcular liquidación y finiquito?
Finalmente, ya que se tienen los conceptos que aplican en la liquidación y finiquito, veamos ejemplos prácticos para que sepas cómo realizar este cálculo y que no haya errores ni malentendidos.
Un elemento clave en ambos casos es el salario diario, que se obtiene dividiendo lo que ganas mensualmente entre los 30 días totales. Es decir, si ganas 10,000 pesos, el salario diario sería 333.33 pesos.
Teniendo esto como base, vamos a calcular cada uno de los ejemplos que incluimos para que quede claro el cálculo de liquidación y finiquito.
Calcular liquidación
El cálculo de la liquidación depende de varios factores, incluyendo la antigüedad del empleado, el salario, y las condiciones específicas de su contrato de trabajo. Aquí tienes un ejemplo práctico:
Supongamos que un empleado con un salario mensual de $10,000 y 5 años y medio de servicio es despedido sin causa justificada. El cálculo de su liquidación podría ser el siguiente:
- 3 meses de salario: daría un total de 30,000 pesos.
- Prima de antigüedad: por cada año trabajado, son 12 días de salario, pero solo aplica cuando se tienen más de 15 años de antigüedad, así que en este caso, no entraría el concepto.
- 20 días de salario por cada año de trabajo: si llevas 5 años, serían 100 días de salario, dando la cantidad de $33,333.
- Aguinaldo proporcional: al haber trabajado solo 6 meses del año, el aguinaldo sería como el 50%, es decir $2,500.
Por lo tanto, la liquidación total sería la suma de 30,000 + 33,333 + 2,500= 65,833 pesos.
Calcular finiquito
El cálculo del finiquito varía según el caso, pero generalmente sigue una fórmula que incluye varios componentes. Aquí te presento un ejemplo práctico:
- Determina los salarios pendientes: calcula cualquier salario que no se haya pagado hasta la fecha de término laboral.
- Calcula las vacaciones no disfrutadas: suma los días de vacaciones acumulados y no tomados y multiplícalos por tu salario diario.
- Agrega bonificaciones proporcionales: incluye una parte proporcional de las bonificaciones anuales, como el aguinaldo, basado en el tiempo trabajado durante el año.
Ejemplo: supongamos que un empleado con un salario diario de $333 ha trabajado 6 meses en el año y decide renunciar. Tiene 5 días de vacaciones sin tomar y le corresponde la mitad de su aguinaldo. El cálculo sería:
- Salarios pendientes: $0 (si se ha pagado todo hasta la fecha).
- Vacaciones no disfrutadas: 5 días x $333.33 = $1,666.65.
- Bonificación proporcional (aguinaldo): suponiendo un aguinaldo total de $5,000, la mitad sería $2,500.
Entonces, el finiquito total sería $1,666.65 (vacaciones) + $2,500 (aguinaldo proporcional) = $4,166.65.
¡Infórmate y gestiona la liquidación y finiquito para evitar problemas legales!
Como hemos visto, la liquidación y finiquito son dos conceptos que se deben tener muy claros dentro de la gestión de una empresa y en el área de Recursos Humanos, para no enfrentar problemas legales.
Los empleados tienen el derecho de exigir el pago correspondiente, dependiendo de la situación que se presente, por lo que es importante que los profesionales del área de RRHH se mantengan actualizados sobre este tema y estar protegidos ante cualquier problema o demanda laboral.
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