De acuerdo con el Índice de Capital Humano (ICH), México ocupa el puesto 61 de 174 naciones, con un potencial de 0.61. Dicho índice se mide en términos de productividad para la siguiente generación de trabajadores, es decir, los jóvenes.
Para obtener el resultado, el índice utiliza un parámetro donde un trabajador promedio tiene acceso a educación y salud completa.
El Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (CONOCER) es el organismo paraestatal del Gobierno Federal de México, adscrita a la Secretaría de Educación Pública (SEP), encargada de colaborar con la competitividad económica y desarrollo educativo de México, basado en el Sistema Nacional de Competencias de las Personas (SNC).
Cofide contribuye en la evaluación para la certificación de los estándares de competencia que las personas han adquirido a lo largo de su vida profesional. Aquí aprenderás todo sobre el tema. ¡Sigue leyendo!
El estándar de competencia laboral es un documento oficial que se aplica en toda la república mexicana. Este documento sirve como referente para evaluar y certificar la competencia laboral de las personas.
El documento especifica el conjunto de conocimientos, habilidades, destrezas y actitudes indispensables que debe tener una persona competente para desempeñar su trabajo con el mayor rendimiento posible.
El propósito es desarrollar la excelencia y competitividad de todos los mexicanos.
El estándar de competencia laboral busca que las personas desarrollen 12 facultades personales que no requieren de estudios académicos ni especializaciones.
El respeto es uno de los valores más importantes, por lo que, respetar a los demás y su trabajo permitirá que tu marca profesional crezca. Al igual que respetar a las personas mayores de la empresa.
Para que un ambiente laboral sea sano y productivo, es imprescindible contar con personas que tengan una actitud positiva y no que transmitan negatividad, quejas y problemas.
El campo laboral también requiere una actitud lógica y consecuente con los principios que cada individuo profesa.
Siempre es esencial querer ser mejores profesionales y tener la voluntad de reforzar nuestra formación. Este apartado es fundamental hoy en día, debido a la exigencia y competitividad que existe en el mercado laboral.
Ser constante es básico para un desenvolvimiento satisfactorio, ya sea en nuestra vida personal o profesional. La constancia es lo que genera resultados positivos y con regularidad.
Dar las gracias cuando las personas nos ayudan es un acto de humanidad, respeto y agradecimiento. Además, ser agradecido fortalece las relaciones entre personas.
La puntualidad está infravalorada. Siempre es importante estar a tiempo en una reunión, cumplir con la fecha de entrega y no jugar con el tiempo de los demás, incluso si el resto juega con tu tiempo.
Ser responsable en el trabajo aumenta tu valor en la empresa. Los colaboradores de valor son motivo de retención dentro de una organización.
La iniciativa está bien vista tanto en relaciones personales como profesionales. Demuestra interés y conocimiento de nuestra área de trabajo.
Tratar a las personas con amabilidad es un buen hábito. Significa no ser grosero, pedir las cosas diciendo “por favor” y dar preferencia a los compañeros mayores.
Contar con una personalidad bien definida, colaboradora, con pensamiento crítico e independencia, son las bases de un buen profesional, así como evitar actitudes individualistas haciendo quedar mal a los demás para quedar bien con otros.
El sentido común es la capacidad de valorar situaciones y tomar decisiones acertadas. Es conocimiento, prudencia, responder ante una eventualidad o dar una explicación sobre algo que haya sucedido. También es un complemento de las competencias enumeradas anteriormente.
Este estándar de competencia está orientado a personas que necesitan conocimientos, habilidades, destrezas y actitudes para desempeñarse como instructores de cursos de formación presencial grupal.
Las funciones de los instructores empieza desde la planificación, preparación y conducción de la sesión, utilizando técnicas de enseñanza grupales que faciliten el proceso de aprendizaje, hasta la evaluación de la capacitación antes, durante y al finalizar el curso.
Este estándar toma en cuenta que la persona que está encargada de diseñar cursos formativos de capital humano considere el diseño de capacitaciones presenciales elaborando la carta descriptiva (herramienta didáctica que da claridad e identifica las necesidades para la planeación) y la selección de técnicas para la instrucción.
También consiste en diseñar instrumentos de evaluación y satisfacción de los cursos de capacitación presenciales. Además de desarrollar manuales para dicho curso, así como el manual del instructor y la selección de fuentes de información del manual del participante.
Este estándar contempla la metodología que las personas utilizan para evaluar a los candidatos que desean certificarse en los estándares de competencia, garantizando la transparencia, imparcialidad y objetividad.
Este estándar abarca todas las competencias imprescindibles que debe tener un desarrollador de cursos de capacitación virtual ejecutando las siguientes actividades:
Los estándares de competencia buscan desarrollar tres pilares: conocimiento, competitividad y crecimiento. En Cofide podemos ayudarte a conseguir la certificación CONOCER que deseas obtener.
Si eres capacitador, instructor, docente o expositor, no lo pienses mucho y empieza a crecer profesionalmente, alcanzando la certificación y logrando el éxito en tu área de especialización.